
El Reino Unido ha acogido este año el COP26, la Cumbre sobre Cambio Climático que ha tenido lugar en Glasgow del 31 de octubre al 12 de noviembre. La conferencia, organizada por la ONU, ha congregado a decenas de miles de negociadores, representantes gubernamentales, empresas y ciudadanos y supone el marco más importante en el que los países participantes actualizan sus planes para reducir emisiones CO2 y combatir así el mayor riesgo que afronta el mundo, el cambio climático.
Reino Unido, que preside este año la vigésimo sexta cumbre COP, es un país líder en la lucha contra el cambio climático y ha establecido un ambicioso plan en materia de energías renovables.
Ya durante el período 1990-2019, la economía creció un 78% al tiempo que se consiguió reducir las emisiones de carbono en un 44%, el crecimiento más rápido que se registró dentro del G7.
Reino Unido también es un país pionero en materia legislativa ya que ha sido la primera economía en regular por ley la eliminación de emisiones de carbono para 2050. Otro de los grandes objetivos que ha fijado el gobierno es la reducción de la emisión de gases efecto invernadero en un 78% para 2035 y entre las principales medidas adoptadas para conseguir estos objetivos se pueden citar las siguientes:
En agosto del presente año el gobierno aprobó el Strategic Innovation Fund, un fondo de £450 millones destinado a la financiación de proyectos innovadores cuyo objetivo sea facilitar y agilizar la transformación del sector hacia la producción de energías verdes. El fondo, que estará disponible durante cinco años con posibilidad de incrementarse según la consecución de objetivos, lo gestionará Ofgem (autoridad reguladora de los mercados del gas y la electricidad) y la agencia Innovate UK. Para poder acceder a estos fondos, los proyectos deberán abordar las siguientes áreas: sistemas de integración, datos & digitalización, calefacción y transporte.
Otro plan aprobado este mismo mes de septiembre es el denominado Contracts for Diference, en su cuarta ronda, un fondo £265 millones anuales para fomentar la producción de electricidad baja en carbón. De éstos, £200 millones irán destinados a granjas eólicas ubicadas en el mar, £55 millones se dedicarán al desarrollo de técnicas innovadoras de los cuales, £24 millones están destinados a plataformas eólicas flotantes y, finalmente, habrá £10 millones para proyectos relacionados con energía solar y eólica.
Según los últimos datos que ofrece el Departamento para Negocios, Energía y Estrategia Industrial, en el año 2020 la generación de energía renovable sobrepasó, por primera vez, a la procedente de fuentes fósiles. Así, la electricidad verde representa el 43,1%, lo que ha supuesto un incremento del 36,9% en comparación a 2019.
La generación de energía renovable en su total se ha incrementado en un 13%, siendo la eólica la que representa casi un 77% del total. A su vez, la eólica ubica en el mar representa el 75% de esta categoría, lo cual sitúa al Reino Unido como el principal productor de energía eólica en mar a nivel mundial.